Crece la pobreza: el número de hogares vulnerables que cobra el Ingreso Mínimo Vital sube en 379.000 personas el último año

El Ingreso M?nimo Vital (IMV) es una prestaci?n dise?ada para completar la renta de las familias vulnerables que cobran muy poco dinero o no tienen ingresos y est?n condenadas a la pobreza. En el ?ltimo a?o, el n?mero de beneficarios de esta ayuda ha crecido en Espa?a un 18,7%, lo que supone que se han sumado 378.838 personas que ahora necesitan este dinero extra del Estado para vivir.

Seg?n los datos publicados este viernes por el Ministerio de Seguridad Social, en total en el pa?s hay 785.722 hogares que reciben esta prestaci?n, en los que viven 2,4 millones de personas (el 40,8%, ni?os) que necesitan estos ingresos para poder vivir dignamente. De media, reciben 485 euros por hogar, con lo que el Estado destina 406,1 millones de euros mensuales a su pago.

La prestaci?n var?a en funci?n del n?mero de personas que viven en cada hogar, con lo que cambia mucho de unas familias a otras.

"Tanto por las caracter?sticas de los titulares como de los beneficiarios, podemos decir que el IMV tiene un marcado perfil femenino, donde el 67,9% de los titulares (533.681) son mujeres", ha explicado el departamento que dirige Elma Saiz. Del total de familias cubiertas por el IMV, en m?s de dos tercios (538.873 hogares, el 68,6% del total) hay ni?os y 133.078 son hogares monoparentales, la mayor?a encabezados por mujeres.

La brecha generacional que sufre el pa?s se constata al analizar la edad media de los beneficiarios del Ingreso M?nimo Vital, que se sit?a en los 28,37 a?os si se cogen ?nicamente los titulares de la prestaci?n -es decir, omitiendo los beneficiarios indirectos, por ejemplo los hijos en una familia en la que el titular es la madre-. Son los j?venes los que est?n atravesando m?s dificultades por los precios de la vivienda desorbitados -tanto en compra como en alquiler- y la precariedad del empleo, y eso se traduce en que muchos necesitan ingresos adicionales.

Para facilitar que los j?venes puedan acceder a la prestaci?n, el Gobierno ha permitido que puedan solicitarla los mayores de 18 a?os o menores emancipados con hijos o hijas a cargo y se ha reducido el per?odo de vida independiente para los j?venes menores de 30 a?os, de 3 a 2 a?os.

Aunque es positivo que el IMV cubra las necesidades de quienes lo necesitan en Espa?a, no lo es tanto que cada vez haya m?s familias que tienen que recurrir a esta prestaci?n, ya que denota un empobrecimiento general de algunas capas de la sociedad. El Ministerio admite que es un instrumento "clave en la lucha contra la pobreza y la exclusi?n social".

M?nimo un a?o de residencia legal en Espa?a

Para solicitar el IMV, es necesario haber residido en Espa?a de forma legal, efectiva y continuada durante al menos el a?o anterior. La residencia se demuestra mediante la inscripci?n en el registro central de extranjeros en el caso de ciudadanos comunitarios y suizos, o con la correspondiente autorizaci?n en el caso de personas de terceros pa?ses. El domicilio en Espa?a se verifica con certificado de empadronamiento, y la unidad de convivencia se demuestra mediante el libro de familia, certificados del registro civil o datos padronales.

Adem?s, tanto la persona solicitante como su hogar deben encontrarse en situaci?n de vulnerabilidad econ?mica, al no disponer de ingresos o patrimonio suficientes seg?n los est?ndares. El IMV es compatible con rentas del trabajo y contempla incentivos para favorecer la inserci?n laboral y mejorar las condiciones de vida de las familias.

Asimismo, el nuevo sistema de doble revisi?n de ingresos implantado permite a las familias conocer de antemano la actualizaci?n de su prestaci?n. Como consecuencia, desde mayo, los beneficiarios saben ya si, en funci?n de los ingresos del a?o anterior, su prestaci?n se incrementar?, se reducir? o se extinguir?.